Afirmó que los libros sólo tienen dos olores: "El olor a nuevo, que es bueno, y el olor a libro usado, que es todavía mejor".
"Mandé al infierno a Yahoo", reveló el novelista, al contar que el sitio de Internet le ofreció poner una de sus novelas online. Frente al desarrollo de los libros electrónicos, dijo que desconfía del dispositivo Kindle. "Esos no son libros", afirmó.
Su defensa de la palabra impresa lo ha llevado, también, a encabezar una cruzada por las bibliotecas, en vías de extinción.
"No creo que las bibliotecas estén obsoletas y no permitiré que acaben con ellas, así me tenga que poner en medio para evitarlo", dijo Bradbury, uno de los padres de la literatura fantástica, que anticipó muchas de las cosas que el mundo viviría en el siglo XXI.
Ensayista, poeta, arquitecto y visionario, Bradbury cumplirá este mes 89 años y recordó que hace casi seis décadas alquiló una máquina de escribir en la biblioteca de la Universidad de California para escribir Fahrenheit 451, su obra cumbre.
Un tema que hoy lo perturba es su relación con Mel Gibson, quien le compró hace seis años en 500.000 dólares los derechos para una versión cinematográfica de su libro El peatón.
"Le devolvería el dinero con tal de que se haga la película. Es un gran actor, que además ha hecho grandes películas, pero hasta ahora todos los guiones que leí son una merda", afirmó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario