No es sencillo expresar los sentimientos, y el Lalo de los Santos, tenía no solo la facilidad de palabra,
sino una genial y exquisita forma de componer.
Una vuelta me lo crucé en un viaje en subte en la línea A, y no me animé a saludarlo y agradecerle,
su poesía potente, certera, de esa que te moviliza, cada vez que la lees, o la escuchas.
Un poeta, es aquel que logra emocionarte en la cola del banco, o ande sea.
Lalo lo logra, y los aprendices, observamos (atentamente)
Saltaré los muros (todos)
abriré las puertas con tu amor
y haré un testamento para darte
Un sol con mis manos
y un horizonte para vos
Serás un velero (tendrá rumbo?)
y la vida pondrá el mar (y el viento)
Y tal vez (quizá, o nunca jamás)
serás poeta, obrero, músico
bohemio, hombre, mujer
qué importa?
si al fin puedo enseñarte (podré?)
a ser de verdad
hijo mío que vendrás (dónde, cuándo?)
Sos un tibio brote
de mi amor y el de mamá
Y tal vez...
Hijo mío que ya estás!
Bitácora devenida Golfista, temporal y afortunadamente. La sabiduría es ante todo conocimiento de si - proverbio chino.
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