Para escuchar y tener la mejor música. Este era el lema de Notorious. Quizá se quedaba corto.
Para mi, el oasis de Callao 966 es algo difícil de reducir. Es mucho más que música.
Para mi, el oasis de Callao 966 es algo difícil de reducir. Es mucho más que música.
Diría que es una experiencia: desde el lugar donde reside Notorious, los discos, las mesas, el innovador sistema de sonido que supo tener en las mesitas de la disquería, las remeras, las ofertas de CD y DVD, los afiches, las postales con la programación, y el acierto de dejar un manojo en la puerta.
Nos volveremos a ver.
Esto sin mencionar el nivel de la programación, los ciclos, los músicos, el público (en general). Notorious configuró toda una experiencia, arrancando en otro siglo, cuando el jazz vernáculo era mas reducido y acotado. Gracias a impulsos como estos, uno pudo acercarse a la música de enormes artistas.
La mayoría de las veces que fui allí, salí reconfortado. No voy a aflojar, porque la mera presencia de este reducto jazzero, era un motivo de sobra para querer acercarme desde el sur hasta Buenos Aires.
Agradezco el profesionalismo de todo el equipo: la disquería, el morfadero, los programadores y también a los habitúes.
No dejaré de pasar por Callao 966 para buscar mis n postales con la programación local, para disfrutar de esas tremendas y ocurrentes fotos, con el calendario y la actividad mensual.
Nos volveremos a ver.
Gracias y hasta pronto!, Quique F. - cronista del swing
