Del latín alamanus, con el mismo significado, tomada del germánico alamans, usado para referirse a 'todos los hombres'.
Los romanos llamaban alamanes al pueblo germano más cercano a las fronteras del Imperio, pero la palabra llegó al español a partir del francés allemand.
Gentilicio compartido, con el portugués alemão, pero distinto al del inglés german y del alemán Deutsche.