Compartimos la vista de un consagrado argentino que visitó el jueves 10 de mayo de 2018, la ciudadela de Loppiano. Pequeña ciudadela que busca ser un polo universal de fraternitas, inspirado por la visión de Chiara Lubich, Igino Giordani y una pléyade de focolares que siguen bregando para que "todos seamos uno".
Nuestro ilustre visitante, compartió gran parte de la mañana entre los miles de visitantes que se dieron cita en esta región de Grosseto.
El buen Francisco, nos invitó a salir de nuestra zona de confort, a salir de nosotros mismos, a no “escondernos en el vivir tranquilo, en “lo correcto” o, es más, en la sutil hipocresía, (…) sino a vivir como discípulos sinceros y valientes en caridad y verdad” y a afrontar las dificultades “con tenacidad, serenidad, positividad, fantasía… y también con un poco de sentido del humor”.
Allí evidenció una vez mas, su caracter de Pastor, y de porteñidad, que aplica urbe et orbi. Más aún, cuando se siente en familia.
Res, non verba
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