Rafa (Echenique) llegó a la vuelta final del Open de France, como
puntero y favorito indiscutido.
Venía con gran expectativa, y nos los espectadores expectantes.
Había quedado en punta luego de la ronda del viernes, y el sábado la
mantuvo, pero todos estaban ahicito nomás.
Y quizá la vuelta inolvidable del domingo anterior en Munich, cuando
anotara esos increíbles 27 golpes, nos hacían prever el desenlace
parisino. Pero fue una de las vueltas mas opacas del puntano. Anotó 41
golpes con dos triple bogeys.
Puede ser, que de un torneo a otro un mismo jugador varie en 14 golpes
su score en los últimos 9 hoyos?
Por supuesto!
Es la gracia de este maldito/adorable noble deporte.
Tal como la vida, te acaricia, te malcria.
Y también te sopapea como pocos.
Rafa, que el fuego fatuo del ánimo siga intacto. Vd.tiene esa mezcla
de virtud, talento y laburo. Conserve la polenta para Turnberry. El
British será la próxima meta.
Y como The Open, no hay dos. Es el Everest del golf. A escalar!
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