A Cristina
Me torcí, pero seguiste estando allí.
Tuve dobleces,
y fuiste capaz de enderezarlos.
Los golpes fueron varios,
seguidos, profundos, contundentes
y tu mano no se cerró.
¿Se podrá entender?
¿Habrá razón capaz de explicar lo inexplicable?
Creo (simplemente), es un ejemplo concreto
de amor incondicional.
Ese que no es esquivo,
que no busca el beneficio,
sino la entrega sincera
ande la relación es de a dos
(con sus mas y con sus menos).
Tuve una pesadilla,
pero me desperté,
y allí estabas a mi lado
(pese a que me había dado vuelta).