Un concepto clave desde el punto de vista chino de la salud es el del equilibrio (tan exiguo/escurridizo/lábil por estos lares).
Los clásicos afirman que las enfermedades se manifiestan cuando el cuerpo se desequilibra y el ch'i no fluye con naturalidad.
La enfermedad se debe a una serie de cuestiones que conducen a la desarmonía y al desequilibrio.
También afirman que la naturaleza de todas las cosas es de tipo homeostático.
Existe una tendencia natural a retornar al equilibrio.
Perder y recuperar el equilibrio se considera un proceso natural (perderlo es natural, recuperarlo pareciera excepcional!), que se da permanentemente a lo largo de la vida.
Los textos "clásicos" tampoco trazan una clara divisoria entre salud y enfermedad. Ambas son naturales, y forman parte de un continuo, como aspectos de un mismo proceso de fluctuación, donde el organismo individual cambio continuamente en relación con un medio ambiente en estado de mudanza.
Es responsabilidad personal del individuo, mantenerse sano, cuidando de su propio cuerpo, observando las reglas de la sociedad y viviendo de acuerdo con las leyes del universo. Y la enfermedad se interpreta como falta de cuidado por parte del individuo (sonamos!).
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