Es posible que una artista con buen rating televisivo deje la comedia y se dedique a cultivar el folk?
Este camino es el que eligió Juana Molina. Dejó su laburo una década atrás, pa' zambullirse a la música étnica, que por cierto tuvo mas reconocimiento fuera de nuestro ispa (te suena, no?)
Su último y quinto vinilo (si le digo así, y qué?, vos me entendés), es jugado.
Combina voces vanguardistas con atmósferas clásicas.
Tiene guitarras loopeadas, percusiones hipnóticas y un poco de retorno: el tema que le da título al disco suena como dos canciones tocadas a la vez.
La pieza central del disco es "Los hongos de Marosa", construido sobre armonías asimétricas, teclados envolventes y texturas de Medio Oriente.
But, likeBrian Wilson o Kevin Shields, Juana Molina logra un material muy arriesgado con melodías casi tan accesibles como las del pop convencional.
Qué otra cosa podía esperarse del fruto de Chunchuna Villafañe y Horacio Molina.., una mina preciosa, con un talento que la desborda. Y por suerte, no se marea la naifa.
Avanti morocha/blonda. Vamo' la Juana! Está un poco loca, bienvenida al tren.
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